Además de una de nuestras herramientas más poderosas de comunicación, la sonrisa es también un reflejo de nuestra personalidad. Fruncir el ceño, beber con una pajita, silbar o fumar son algunas de las causas, además del envejecimiento natural, detrás de las arrugas marcadas alrededor de los labios. También hay casos en los que ciertas afecciones pueden causar parálisis y asimetrías en algunas zonas de la cara y afectar a la simetría de tu sonrisa. Si te acomplejan esas arrugas o quieres mejorar la simetría de tu sonrisa, el Botox puede ser el tratamiento más recomendable para conseguirlo con un resultado sutil y eficaz.
Hablamos con la doctora Mara Weinstein Velez, dermatóloga certificada y experta en estética facial, sobre qué se puede hacer en estos casos y qué resultados puede conseguirse con un tratamiento de Botox en la zona alrededor de la boca. Antes de meternos de lleno en materia, recordemos que el Botox, conocido científicamente como toxina botulínica A, es una neurotoxina que actúa impidiendo la comunicación entre los nervios y los músculos.
La doctora Weinstein destaca que la asimetría labial puede ser causada por diversas razones, desde la parálisis de Bell (una afección que causa debilidad repentina en los músculos de un lado de la cara) hasta las particularidades en la forma de hablar de cada uno. Al inyectar Botox en músculos específicos, como el elevador del labio superior, se puede lograr una sonrisa más equilibrada y armoniosa. Este procedimiento es ideal para quienes buscan resultados discretos, ya que permite realzar la belleza natural sin los riesgos asociados a cambios drásticos.
Hablando de cambios drásticos, también es importante que recuerdes que antes de probar cualquier tratamiento estético es clave asegurarse de que el profesional que te lo va a hacer está cualificado y certificado. “Aunque el Botox pueda parecer algo sencillo, recuerda que se trata de tu rostro y necesitas un inyector acreditado con un profundo conocimiento de la compleja anatomía del rostro que te va a tratar”, explica la doctora Weinstein. “Hay muchos inyectores que no están certificados o que se certificaron tras realizar un curso de fin de semana sobre inyecciones. En mi opinión, un curso de fin de semana es cuestionable comparado con médicos certificados con más de 13 años de formación y muchos años de práctica”.
Y por último, ¡barato no significa mejor! “Algunos inyectores compran, sin saberlo, productos falsificados de fuentes dudosas porque son más baratos. El Botox es caro, así que no busques una ganga cuando se trata de tu salud”, advierte la experta.
Si lo estás considerando, sigue leyendo para conocer lo que nos contestó la doctora Weinstein sobre el procedimiento.
¿Cómo funciona el Botox en términos de control muscular y simetría en los labios?
La función principal del Botox es impedir la comunicación entre el nervio y el músculo. El músculo que rodea la boca se llama orbicular de los labios y también ayuda a controlar parte del movimiento labial. Si se aplica Botox en este músculo, ayudará a suavizar las expresiones y los movimientos musculares que realiza con la boca, como fruncir el ceño, beber con una pajita o silbar. Con el tiempo, estos movimientos pueden contribuir a la formación de líneas verticales sobre los labios o «líneas de fumador», incluso si nunca ha fumado.
¿Cualquiera puede probar este tratamiento?
En algunos casos, el tratamiento con Botox alrededor de los labios podría no ser adecuado debido a la forma en que reduce el movimiento muscular. Los músicos que tocan instrumentos de viento, por ejemplo, pueden tener dificultades con la motricidad fina (clarinetes/flautistas) o los cantantes.
Hay otros dos músculos alrededor de la boca que contribuyen al movimiento labial: el DAO y el DLI. Si alguien sufre de parálisis de Bell, por ejemplo, y como resultado tiene el labio inferior caído o una sonrisa torcida, se puede usar Botox para corregir estas asimetrías. El Botox también se puede inyectar en el músculo elevador del labio superior y de las aletas nasales para corregir una sonrisa gingival (ese tipo de sonrisa en la que se muestran mucho las encías) que provoca que los labios se vean más.
¿En qué se diferencia el procedimiento para quienes buscan una mejora sutil frente a un cambio más drástico?
El Botox se puede aplicar estratégicamente sobre el labio superior, en el músculo obicular de la boca, para crear el tan popular «lip flip». Este tratamiento crea la apariencia de un labio superior más voluminoso al debilitar temporalmente el músculo que contribuye al fruncimiento. El Botox también se puede aplicar en el músculo DAO para ayudar a levantar las comisuras labiales y evitar que se hunda con el tiempo. Para un cambio más drástico, se pueden utilizar rellenos dérmicos de ácido hialurónico, que duran mucho más y se pueden colocar estratégicamente para añadir más volumen sin parecer los temidos labios de pato.
