Las inyecciones de polinucleótidos son la última moda en el mundo de la belleza, y el ingrediente secreto es el esperma de salmón. Es como el tratamiento facial con esperma de salmón por el que apuesta Jennifer Aniston, pero este nuevo tratamiento utiliza inyecciones para estimular la piel. A diferencia de los rellenos tradicionales, estas inyecciones rejuvenecen la piel y están causando furor en el extranjero. Prometen estimular el colágeno, aumentar la elasticidad de la piel y reducir los signos del envejecimiento. Pero, ¿qué son las inyecciones de polinucleótidos y por qué se utiliza el esperma de salmón? Esto es lo que hay que saber sobre esta extraña tendencia.
Expertos destacados
- La Dra. Doris Day es dermatóloga titulada en Nueva York.
- El Dr. Yannis Alexandrides es un cirujano plástico colegiado afincado en Londres, fundador de la clínica 111 Harley St. y de 111SKIN.
¿Qué son las inyecciones de polinucleótidos?
Las inyecciones de polinucleótidos entran en la categoría de potenciadores de la piel, como el popularísimo Profhilo, pero utilizan polinucleótidos polimerizados en lugar de AH. «Los polinucleótidos son naturales, derivados de fragmentos de células germinales de peces, normalmente salmón, y contienen moléculas de ADN altamente purificadas y extraídas de las gónadas de los peces», explica la dermatóloga neoyorquina Doris Day, MD. «Son bioestimulantes, lo que significa que pueden ayudar a fomentar la producción de colágeno y elastina. El tratamiento está disponible en Europa y Asia bajo marcas como Ameela, PhilArt, Rejuran, Nucleofill, VITARAN y PhilArt.
¿Cómo funcionan las inyecciones de polinucleótidos?
Los polinucleótidos activan los fibroblastos, osteoblastos y adipocitos, células encargadas de producir colágeno y sostener los tejidos conjuntivos. Según el Dr. Yannis Alexandrides, cirujano plástico de la clínica 111 Harley Street de Londres, «funcionan muy bien en determinadas zonas del rostro, sobre todo en la zona del lagrimal bajo los ojos, y también pueden inyectarse en el cuello, las manos y el escote«. El experto explica que los polinucleótidos se destilan, purifican y mezclan en una fórmula a base de agua antes de inyectarlos en la piel.
¿En qué se diferencian de los rellenos tradicionales?
Los polinucleótidos se inyectan muy superficialmente en la piel, a diferencia de los rellenos dérmicos, que se inyectan más profundamente para proporcionar un efecto voluminizador. Los rellenos tradicionales, como el ácido hialurónico, están diseñados para añadir volumen y crear equilibrio y simetría facial. Pero el Dr. Alexandrides señala que «las inyecciones de polinucleótidos tienen una finalidad distinta a la de los rellenos tradicionales, ya que no están pensadas para añadir volumen. Están pensadas para promover la producción de colágeno y mejorar la calidad general de la piel».
¿Por qué esperma de salmón?
Los estudios han demostrado que el ADN del salmón es una fuente óptima de polinucleótidos. El Dr. Alexandrides menciona que «proporciona cadenas de polinucleótidos más largas y cuanto más largas sean las cadenas, mayor será la bioestimulación del tejido, lo que se traduce en un aumento de la longevidad del tratamiento».
Ventajas de las inyecciones de polinucleótidos
Los expertos sugieren que las inyecciones de polinucleótidos pueden disminuir la pigmentación, potenciar el colágeno y la elasticidad, reducir las líneas de expresión y rellenar las ojeras. El Dr. Alexandrides añade: «En algunos pacientes, el relleno de ácido hialurónico inyectado en esta zona puede crear hinchazón, ya que el ácido hialurónico atrae el agua. Los polinucleótidos trabajan con el ADN del propio cuerpo para ayudar a promover la regeneración celular, lo que puede hacer que la zona de debajo de los ojos se vea más luminosa. Esto se debe a que aumenta la renovación celular, reduce el daño de los radicales libres y proporciona una mayor síntesis de ácido hialurónico».
Riesgos y consideraciones
Aunque las inyecciones de polinucleótidos ofrecen varias ventajas, también hay que tener en cuenta los riesgos. La Dra. Day señala que «la mayoría de los datos que he visto se refieren al uso alrededor de cicatrices atróficas, o indentadas, y los resultados parecen subóptimos». Añade que los efectos suelen durar unos seis meses y que ella no ha incorporado las inyecciones de polinucleótidos a su consulta: «Tenemos mejores opciones con resultados más duraderos y fiables.»
El Dr. Alexandrides advierte que, aunque las inyecciones de polinucleótidos suelen ser seguras, existen riesgos comunes asociados a cualquier tratamiento inyectable, como hematomas, hinchazón o infección. Recomienda una serie de dos a tres tratamientos para obtener resultados óptimos, con sesiones de mantenimiento cada seis a nueve meses.