¿Mummy Facial? El tratamiento que tu piel necesita sin que lo sepas

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Si queremos tener una piel saludable, sabemos que la mejor manera de lograrlo es teniendo una buena rutina de belleza que incluya suero, hidratante y protector solar. Estos son pasos esenciales para ayudar a retrasar un poco el paso del tiempo. Y es que los agresores ambientales le pasan factura a la piel y si no tratamos de combatirlos a tiempo, es posible que el daño sea irreversible. Por eso, además de tener una rutina completa, también es importante recurrir a otros tratamientos que ayuden a mejorar la piel a un nivel más profundo. Si bien es cierto que existen tratamientos no invasivos que prometen maravillas, también es una realidad que muchos de estos son un poco costosos y no todas tienen acceso a ellos. Así es que una de las mejores alternativas para tener una piel radiante sin mucha complicación y sin gastar mucho dinero, es optar por faciales. 

Más allá de ser una experiencia relajante, los tratamientos faciales tienen el propósito de renovar, tratar, fortalecer y proteger la piel desde adentro. Eso sí, no todos son iguales. Hay algunos que simplemente limpian y exfolian, y otros que tratan profundamente la piel para mejorar problemas como la textura, la hiperpigmentación, las arrugas y hasta el eczema. Lo mejor es que es un tratamiento que arroja resultados inmediatos. 

Uno de esos faciales que te dejan el rostro como nuevo, es el Mummy Facial, que además de ayudar en la producción de colágeno y mejora la renovación celular. Pero para saber más acerca de los increíbles beneficios de este tratamiento, hablamos con  Kristyn Smith, esteticista y fundadora de Practise, un spa localizado en la ciudad de Nueva York. Lee a continuación todo lo que nos contó la experta.

¿Qué es el Mummy Facial y por qué se llama así?

El nombre de Mummy Facial es en realidad un apodo que los clientes le dieron a nuestro tratamiento.  Proviene de la gasa que usamos durante el tratamiento, la cual envuelve el rostro de una manera que recuerda a una momia. Pero en realidad, es un tratamiento personalizado que utiliza tecnología de iontoforesis e ingredientes activos para abordar preocupaciones específicas de la piel.

¿En qué se diferencia de otros tratamientos faciales en cuanto a técnica y resultados?

A diferencia de los faciales tradicionales que se basan en exfoliación superficial o masajes, este tratamiento utiliza corriente eléctrica para llevar ingredientes activos a capas más profundas de la piel, algo que la aplicación manual no puede replicar. Usamos la tecnología DF, de Environ para realizar iontoforesis y sonoforesis, lo que mejora drásticamente la penetración y absorción de ingredientes como la vitamina C, el ácido láctico y el TCA.

¿Cuáles son los pasos clave del tratamiento?

Comenzamos con una limpieza suave para preparar la piel. Luego aplicamos una solución que consiste en una mezcla de ácido láctico, vitamina C estabilizada o si no aplicamos TCA (ácido tricloroacético) en bajo porcentaje. Todo depende de la condición de la piel del cliente. Se colocan capas de gasa y se usa el dispositivo DF para aplicar una corriente eléctrica baja, lo que ayuda a que los ingredientes activos penetren más profundamente. Terminamos el facial usando terapia de luz roja o exosomas, dependiendo de lo que se quiera lograr.

¿Qué ingredientes activos se utilizan en el tratamiento y cuál es su función?

Personalizamos los activos según la piel del cliente, pero los más comunes son:

  • Ácido láctico para exfoliar suavemente e hidratar
  • TCA (ácido tricloroacético) en porcentajes muy bajos para refinar la textura y dar luminosidad
  • Vitamina C, para darle a la piel protección antioxidante y reparar la pigmentación
  • Sueros de Environ que apoyan la función de la barrera cutánea y la sanación a largo plazo

¿Qué ocurre a nivel cutáneo durante este proceso?

La corriente de iontoforesis abre microcanales en la piel, lo que permite que los activos lleguen a capas más profundas de la epidermis. Esto mejora la renovación celular, estimula la producción de colágeno y ayuda a acondicionar la piel sin la inflamación o el tiempo de recuperación que implican tratamientos más agresivos. Los pacientes sienten un leve cosquilleo o zumbido durante la iontoforesis y la mayoría lo encuentran relajante. Después del tratamiento, la piel puede verse ligeramente sonrosada, pero no irritada. Se siente suave, hidratada y calmada, sin descamación y sin inflamación.

¿Qué condiciones de la piel trata este facial?

Es ideal para piel opaca, congestionada, con manchas o con signos tempranos de envejecimiento. También es muy efectivo para la hiperpigmentación postinflamatoria y la falta de uniformidad en la textura de la piel. Los clientes suelen notar una piel más firme y luminosa incluso después de una sola sesión. Con el tiempo, el tratamiento mejora el tono, la textura y la hidratación, especialmente cuando se realiza cada dos o cuatro semanas. 

¿Quién no es candidato para este tratamiento?

Evitamos este tratamiento en personas con implantes metálicos en el rostro, eccema activo, heridas abiertas o marcapasos. También lo modificamos para embarazadas y aquellos con piel muy reactiva, ajustando la corriente e ingredientes activos. De hecho, este tratamiento puede ayudar a reacondicionar y fortalecer la piel sensible.

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