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Retinol vs. tretinoína: ¿Cuál es el mejor para tu piel?

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PeopleImages / GettyImages

El retinol y la tretinoína son dos de los ingredientes más populares y efectivos en el cuidado de la piel, especialmente cuando se trata de combatir los signos del envejecimiento, mejorar la textura y tratar problemas como el acné o la hiperpigmentación. Ambos son derivados de la vitamina A y comparten muchos beneficios pero aunque suenan similares, tienen diferencias importantes que pueden hacer que uno sea mejor para ti que el otro. El retinol, más suave y accesible, es perfecto para quienes recién se inician en el cuidado de la piel, mientras que la tretinoína, más fuerte y para obtenerla necesitas prescripción. Esta es ideal si buscas resultados rápidos y específicos.

Ya sea que estés buscando reducir las arrugas, minimizar el acné o simplemente obtener una piel más suave y luminosa, conocer las diferencias y los beneficios de cada uno te permitirá tomar una decisión informada sobre cómo incluir estos ingredientes en tu rutinad del cuidado de la piel.

Si te preguntas cuál sería mejor para ti, lee a continuación todo lo que nos explicó Azza Halim, doctora certificada y educadora, quien nos explicó muy bien la diferencia entre ambos ingredientes, cómo funcionan y sus beneficios. Este es un buen momento para que incluyas uno de ellos en tu rutina, así es que sigue leyendo y entérate todo lo que pueden hacer por tu piel.

¿Qué es el retinol?

El retinol es un derivado de la vitamina A, ampliamente utilizado en productos para el cuidado de la piel gracias a sus propiedades antienvejecimiento y renovadoras.

¿Cómo funciona en la piel?

Su mecanismo de acción se basa en estimular la producción de nuevas células cutáneas y promover la renovación celular, lo que a su vez favorece la producción de colágeno. 

¿Qué condiciones trata?

Regula la producción de sebo, ayuda a desvanecer la hiperpigmentación, mejora la apariencia de los poros y suaviza la textura de la piel.

¿Qué es la tretinoína?

La tretinoína también es un derivado de la vitamina A, pero con una concentración mucho más potente. Está disponible solo con receta médica. 

¿Cómo funciona en la piel?

Actúa acelerando el proceso natural de renovación celular, eliminando las células muertas más rápidamente y reemplazándolas por células nuevas. 

¿Qué condiciones trata?

La tretinoína es especialmente beneficiosa para el tratamiento del acné tanto inflamatorio como no inflamatorio, y es excelente para la estimulación de la producción de colágeno, lo que ayuda a minimizar las líneas finas y las arrugas. Sin embargo, debido a su potencia, puede causar efectos secundarios como enrojecimiento, sequedad, descamación e incremento de la sensibilidad al sol, sobre todo en las primeras semanas de uso.

Principales diferencias entre retinol y tretinoína

La diferencia más significativa entre ambos productos es su potencia y la velocidad de sus efectos. La tretinoína, al ser un retinoide de prescripción médica, es mucho más fuerte y actúa más rápido que el retinol de venta libre. El retinol debe ser convertido en ácido retinoico por la piel en dos etapas, lo que lo hace menos potente pero también más suave. Esto lo convierte en una opción más adecuada para quienes tienen la piel sensible. Por su parte, la tretinoína está en su forma activa de ácido retinoico, lo que le permite actuar de manera más directa sobre la piel, pero también puede resultar más agresivo para los principiantes.

¿Se pueden usar juntos?

No se recomienda utilizar ambos productos al mismo tiempo, ya que sus mecanismos de acción son similares y combinarlos puede aumentar el riesgo de irritación, enrojecimiento y descamación. Además, en este caso, menos es más. La tretinoína es más potente por sí sola, por lo que no es necesario combinar ambos productos para obtener mejores resultados. Si usas tretinoína, no obtendrás beneficios adicionales al añadir retinol a tu rutina.

¿Cuál es la mejor manera de incluirlo en la rutina de belleza?

Si eres nuevo en el cuidado de la piel y quieres incorporar un retinoide a tu rutina, lo mejor es comenzar con retinol. Es más suave y menos probable que cause irritación, lo que te permitirá construir la tolerancia de tu piel antes de pasar a productos más fuertes como la tretinoína, 

Mitos comunes sobre el retinol y la tretinoína

Entre los mitos está pensar que tendrás resultados instantáneos porque en realidad puede tomar semanas o meses para ver cambios notables, especialmente con el retinol. Otros mito es pensar que pone la piel más delgada, pero en realidad puede hacer que la piel se vuelva más gruesa al estimular la producción de colágeno. 

Consejos para incorporar el retinol y la tretinoína en tu rutina

1- Para incorporar el retinol a tu rutina, es importante comenzar lentamente.

2- Aplícalo entre 2 a 3 veces a la semana y luego puedes incrementar la frecuencia a medida que la piel aumenta su tolerancia.

3- Antes de aplicarlo debes esperar a que la piel se seque completamente, así minimizas la irritación.

4- Usar una crema hidratante con cualquiera de estos productos también ayuda a reducir la irritación y la sequedad. En este caso, la consistencia es clave.

5- Si decides usar tretinoína, asegúrate de comenzar con una concentración baja y aumentarla gradualmente. Y recuerda que siempre es importante mantener la piel hidratada y protegerla del sol para evitar efectos adversos.

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